Dos poemas de | Lorena Acosta Iglesias
NT
Para lxs locxs: resistid a la historia.
Lo
desfigurado
no
puede hallar
la
forma
según
el antes
y
el después
Parpadea
en
los ojos
del
otro
ad infinitum
cual
amago
del
no-ser
Siempre
los
sellos
abiertos
en
la mirada
del
otro
perpleja
La
ira de la soledad.
Comienzo
de la civilización.
El
fundamento
de
la sociedad
indisociable
mente
típica.
Equinoccio
A
veces
las
palabras
se
extienden
infinitamente
más
allá
del
sonido
y conceden
permiso
intermitentemente
en
tu boca
semiabierta
vertida
en
aviso
un
momento
aún
no.
A
veces
las
palabras
lánguidamente
superpuestas
acarician
la
piel de uno,
con
quien
se
recuesta
que
sea
reconocido.
No
siempre
las
palabras
vierten
un
mundo
con
su eco
la
voz
soterrada
en
pequeños
puntos
hilos
de voz
nos
unen
y
separan
la
ausencia
requiere
de
voz
la
palabra
es
la ausencia
de
voz
el
mundo
cáscara
vacía
yermo
el
sentido
¿acaso
no
fue
todo
eso
y
la ilusión
cae
de
ambos
lados?
No
dejo
de
respirar
cada
sonido,
aún
no
en
la memoria.
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